El sábado por la noche fue le día desde que llegué a Pune que más pudimos alargar la noche. Unos franceses organizaron una fiesta en su casa y, increíblemente, los vecinos no dijeron ni “mu” con lo que no tuvimos ni que sobornar a la policía… Subiré fotos de esto en el facebook.
Pero bueno, este no era el tema de mi historia. Este pequeño párrafo añadido era solo para indicar, que después de acostarnos a las 5 y media de la mañana con un pedo “de helicóptero”, unos cuantos expats y yo nos levantamos sobre las 9 y media de la mañana para irnos a ver como tiraban a los dioses al río… literalmente.
El caso es que desde que comienza la festividad (hace casi 3 semanas), los hindúes compran una figura de Ganesh (dios de los deseos) y le realizan la puja todos y cada uno de los días. La puja es un ritual en el que le pintan la frente (el mítico puntito rojo), le rezan y lo adoran con flores. Pues esto, 3 veces al día ya que si no lo haces, el dios se enfadará contigo y te hará alguna putadita… Me iba a pillar uno como decoración para casa pero Vikas me recomendó que no lo hiciese si no iba a hacerle las pujas así que, como buen gallego cas meigas “crer non creo pero habelas, hailas”…
Y hacer esto todos los días 3 veces al día toooda tu vida (y heredado por tus hijos) pues es un poco coñazo. Así que la manera de librarse de esto, es realizar esta última celebración y “sumergirlo” (nos les mola cuando le digo “lo tiráis”) en el río. Se monta una fiesta de cojones con carrozas tambores y un cabrón golpeando un hierro a morir (subiré videos a youtube), ideal para días de resaca sin dormir…
Bicos rapaces! Nos vemos en una semana!! Por vuestra madre, preparad el churrasco (de ternera) y la estrella Galicia…